Otitis en perros, una infección de oído terrible para tu peludo
La otitis en perros es uno de los principales y más comunes motivos de consulta de dermatología que se me presentan en la clínica.
Cuando nuestro perro se queja de la oreja, la deja caída, se rasca excesivamente, ladea la cabeza o la tiene enrojecida puede que estemos ante una otitis.
La otitis es la inflamación de diferentes partes del oído que causa malestar y dolor.
Según la zona afectada podemos definirla como:
- Otitis externa: es la más común. En ella se ve afectado el pabellón auricular y conducto auditivo externo.
- Otitis media: afecta a las bullas timpánicas
- Otitis interna: afecta al oído interno (coches, cocidas, estructuras nerviosas, etc)
La gravedad siempre será mayor cuanto más adentro del oído del perro nos encontremos.
¿Qué provoca la otitis en los perros?
La otitis o infección de oído en perros puede venir provocada por varias causas:
- Bacterias
- Hongos
- Ácaros
Estos (bacterias y hongos) pueden llegar de forma primaria, por rascados, suciedad o al revolcarse y cada una de ellas puede desencadenar en una otitis.
Otros como los ácaros suelen transmitirse por contacto con animales infectados que hayan contagiado al tuyo.
Además, los traumatismos o cuerpos extraños pueden ser desencadenantes de procesos inflamatorios en el oído llegando a desarrollar una otitis en la oreja de tu perro.
Tipos de otitis en perros según la causa de la inflamación
- Otitis bacterianas: son aquellas causadas por bacterias de diverso tipo que se establecen en el conducto auditivo. Suelen producir una secreción de tipo marrón o parduzco, con bastante mal olor.
- Otitis fúngica: normalmente asociado a malasezzias; un tipo de hongo que se encuentra de forma fisiológica en la piel y que en presencia de humedad y calor prolifera pudiendo producir grandes problemas. Su secreción suele ser muy característica, de color amarillento y olor particular a tocino rancio.
- Otitis por ácaros: Normalmente la secreción es negra, muy oscura produciendo en el animal mucho picor y por tanto rascado de orejas , llegándose incluso a hacer auto traumatismos.
¿Cómo sé yo si mi perro tiene mayor predisposición a padecer infección en el oído?
Los perros con las orejas caídas, con mucho pelo o con los conductos auditivos estrechos tienen una mayor predisposición a padecer otitis que otros.
Además de esto, revolcarse en la hierba o los ambientes húmedos como por ejemplo, ríos o charcas en los que tu perro se puede bañar o «meter accidentalmente» 
suelen provocar una mayor predisposición a padecer otitis canina.
También debemos de tener en cuenta que problemas de alergias o atopias pueden desencadenar en una otitis en perros.
Síntomas de la otitis en perros
Los síntomas de una otitis en tu perro pueden variar en función de la zona del oído donde el peludo tenga el problema, externa, media o interna.
Obviamente cuanto más profunda sea la zona peor, ya que estará más cerca del tímpano y los daños ocasionados pueden ser más graves.
Si observas:
- Secreciones en el conducto auditivo
- Tu perro sacude mucho la cabeza
- Dolor al comer, ladrar o al tocarse/le la zona
- Mal olor (provocada por una infección)
- Rascado excesivo de la oreja
- Cabeza ladeada hacia el oído que le duele
Entonces puede que tu perro padezca de otitis, por lo que deberás acudir al veterinario lo antes posible para realizar un diagnóstico de la situación de tu peludo.
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¿Cómo puedo saber si mi perro tiene otitis?
Para ello, a parte de conocer los síntomas de una otitis en perros que te he comentado justo encima de este punto, lo que tendrás que hacer es llevarlo al veterinario.
Una vez allí y tras comentarle la situación el veterinario necesitará identificar tanto el patógeno que está produciendo esa otitis como qué lo ha desencadenado, para realizar el diagnóstico correcto.
Por eso lo primero que se hace es explorar el conducto auditivo, comprobar que no existe ningún cuerpo extraño, evaluar el tipo de secreción y el grado de inflamación.
En función de la causa de la otitis (bacteriana, fúngica o por ácaros) el tratamiento a seguir será muy distinto.
El problema es que muchas veces este tipo de otitis no tienen una clasificación tan sencilla porque aparecen de forma conjunta provocando infecciones de diverso tipo.
Para poder terminar de realizar un diagnóstico correcto deberemos de analizar el tipo de secreción al microscopio e identificar el tipo de bacteria, hongos o ácaros o su conjunto.
Una vez analizado los resultados y realizado el diagnóstico, el veterinario procederá a seleccionar el tratamiento adecuado para cada caso.
Tratamiento para otitis en perros
Ahora que ya sabes qué le pasa en el oído a tu perro, ¿cómo tratar la otitis en un perros?
Depende.
Podremos aplicar un tratamiento tópico donde sólo se aplica de forma local en el oído o un tratamiento sistémico, basado en medicación oral.
¿Cuándo usamos unos y otros?
Si estamos ante un cuadro leve con sintomatología moderada deberemos se aplicar solo tratamiento tópico. Si ya estamos ante un cuadro más severo o cuadro crónico deberemos de aplicar una combinación de tratamiento tópico y sistémico.
¿Cómo trabajo yo la otitis en perros?
Lo primero de todo es categorizar el tipo de otitis ante la que me encuentro.
Te voy a ir poniendo diferentes ejemplos de las otitis en perros más comunes y cómo las he abordado yo.
Otitis crónica por staphyloococus en un oído
Este peludo vino con un oído lleno de secreción de color oscuro, casi achocolatado con muy mal olor y el conducto auditivo prácticamente cerrado de la inflamación.
Para tratarlo, limpié el oído recogiendo previamente una muestra que mire al microscopio.
Higienicé toda la oreja con douxo auricular y luego pauté un tratamiento con osurnia en ese oído de retición semanal. Además para controlar la inflamación producida y el picor pautamos metilprednisolona (moderin) durante una semana.
A la semana volvió para evaluar (sin limpieza de ningún tipo en casa). El conducto ya estaba mucho menos inflamado aunque no volvió a la normalidad y continuaba con secreción.
Limpié la secreción tanto del pabellón como por dentro y apliqué de nuevo el osurnia.
Después de esa semana, le volví a citar una semana después para repetir la limpieza profunda y explicar al dueño la pauta de limpieza en casa.
Otitis aguda con caída de oreja
El animal manifestaba dolor y no se dejaba tocar. Bajo sedación exploramos el conducto auditivo.
Encontramos una espiga que extraje con el otoscopio, pero también observé una ulceración y enrojecimiento del conducto auditivo sin secreción.
Una vez extraído el cuerpo extraño realicé una limpieza con limpiador fisiológico para retirar toda la suciedad.
Seguidamente apliqué una limpieza suave con un limpiador para fórmulas magistrales como el omniotic con 2 ml de dexametasona diluida y lo pautamos para repetirlo en casa con 5 días.
A continuación revisé que la inflamación hubiera desaparecido, ya que, en caso contrario, podía acabar desarrollando otitis.
Junto con lo realizado, también podía haber pautado un antiinflamatorio o corticoide oral con limpiezas con el limpiador fisiológico del oído.
Otitis por Malasezzia en perros
Este peludo presentó una secreción amarillenta con olor a tocino rancio característico.
Tras tomar una muestra, se puso bajo el microscopio y efectivamente observé que se trataba de malassezias.
No presentaba gran cantidad de secreción ni de inflamación, sólo enrojecimiento de la piel.
Además el animal presentaba también múltiples problemas de alergias.
Lavé bien la zona con limpiador auricular duoxo y después apliqué osurnia repitiendo el proceso pasada una semana.
También recomendé al propietario para los problemas de alergia (ya que el peludo se rasca mucho) productos para el picor y complementos alimenticios (omnicutis) para mejorar la barrera cutánea ya que la alergia puede ser el desencadenante de la otitis.
Junto a esto, mantuve la pauta de limpieza de 2 – 3 veces por semana de los oídos.
Otitis combinada con inflamación y sin respuesta al tratamiento
En este caso observé tanto bacterias como malassezzias. El peludo fue tratado con diversos productos y un previo lavado del oído pero no mejoró.
Lo primero fue tomar una muestra del contenido del oído para poderla cultivar.
Tenemos la opción de probar primero un tratamiento sintomático retirando la secreción y aplicando tratamiento oral y tópico.
Por ejemplo, se limpia bien con duoxo auricular y después aplicamos osurnia (1 aplicación por semana repetido 2 veces) o una fórmula magistral con marbofloxacino (2 ml) y dexametasona (2ml) diluido para limpieza diaria.
Además pautamos una medicación oral con metilprednisolona para bajar la inflamación y antibiótico oral (por ejemplo amoxicilina clavulamico)
Si el proceso no se soluciona, entonces se mandará a cultivar la muestra para ver exactamente el patógeno y si existen resistencias. Se recetará el antibiótico indicado.
Otitis por ácaros
El interior del conducto auditivo presentaba una secreción negra abundante. Se lavó el conducto con douxo auricular hasta arrastrar el máximo posible de la secreción.
Después aplicamos una acaricidad tópico y oral una vez al mes.
Todas estos tratamiento de otitis en perros que te acabo de contar están centrado en otitis del oído externo.
Si profundizamos más y entramos en oído medio – interno, el diagnóstico deberá de ser exhaustivo realizando pruebas de imagen como radiografías o tac para ver las bullas timpánicas.
Incluso se puede dar el caso de tener que realizar una resonancia magnética en aquellos casos que se sospeche cuadros neurológicos veterinarios.
¿Cómo evitar una otitis en perros?
En una palabra: ¡Limpieza!
La limpieza permite mantener el conducto auditivo libre de secreciones y desinfectado.
Mediante una limpieza frecuente del oído del perro arrastraremos bacterias, hongos, ácaros, suciedad y otros cuerpos extraños que van a predisponer a que aparezca la otitis.
También tienes que tener en cuenta que una limpieza frecuente permite detectar de forma rápida un inicio de infección de oído para así poder tratarlo de forma sencilla y con mejores resultados.
Por ello, no me cansaré de repetir y recordar que es muy importante tratar de forma temprana la otitis en perros para evitar que afecte a la parte interna del oído más grave llegando a poder causar cuadros neurológicos severos, migración de patógenos y en los peores casos la muerte del animal.
Y tú, ¿mantienes los oídos de tu perro bien limpios?